
Un trágico accidente es el punto de partida de «Como si fos ahir». Sin embargo, un accidente que tiene un efecto positivo: el reencuentro de unos antiguos compañeros de instituto que, después de veinticinco años, están en el funeral de uno. La época del instituto, cuando hacían BUP y COU el Reina Sibila, los convirtió en un grupo heterogéneo, gamberro y lleno de vida. En los años 80, eran un grupo de jóvenes que pensaban que serían amigos toda la vida, pero después ésta les va repartiendo fichas muy diversas. Y ahora, cuando ya tienen casi cincuenta, se reencuentran y, poco a poco, reanudan aquella amistad, diciéndose que las expectativas de vida no siempre se cumplen y que, si lo hacen, siempre van cargadas con alguna sorpresa.
En 2023 hago mi primera aparición en Com si fos ahir, con un personaje capitular que entra en la tienda de Iván, interpretado por Roger Coma, quien está tratando de enviar un audio de WhatsApp a un chico que le gusta, hasta que mi personaje lo interrumpe buscando tazas de té, de las grandes, y quién sabe si alguna cosa más.
En 2024 vuelvo a la serie con un personaje en dos episodios. De nuevo, la trama se desarrolla junto al personaje de Iván, quien está a punto de casarse, pero conoce a mi personaje, Esteve, en un choque fortuito en las taquillas del gimnasio. Ambos personajes enseguida notan la química y, después de intercambiar teléfonos y alguna que otra mirada, deciden quedar para ir a tomar un café.
Al terminar el café, hay una clara intención por parte de ambos, de continuar con otro plan, hasta que un amigo de Iván, que sabe que él se va a casar, los interrumpe justo en el momento en que están a punto de besarse.